Hola hermanos,
Esta es una breve reflexión sobre los moldes. Están los pasteleros. No me refiero a los sujetos pesados-relamiosos que están dando la coña todo el día, sino a los que se usan para hacer postres. De esos, he encontrado una foto en la red. Mirad qué mona.
Luego están los que nos inventamos y en los que intentamos, antes o después, encajar a las personas, sobre todo a las que están más cerca nuestra. A estrujones, empujones, pellizcos y apretones. Esos (moldes) funcionan bastante peor que los primeros: los sujetos acaban rebosando por los costados, en pequeños chorreones babosos o en plan estallido Big-Bang. Comprobado científicamente.
Existen finalmente los que los rompen (los moldes). De esos hay unos pocos en Physalia, afortunadamente. A ellos les propongo que en nuestra próxima reunión-fiesta se haga un taller de eso: Taller Anti-Moldes (T.A.M.). La Radio de Darwin se apuntaría. La primera. Basta de rebabas.
Besos physalios a todos...
3 comentarios:
Jo cómo te sirvió el último cursillo. Ya llegas hasta categorizar las cosas. No si esto va palante, lástima que sepamos hacer categorías, numerarlas, definirlas, ponderarlas, pero sigamos coleccionando moldes. A mí ya no me caben más tapes en la cocina y mira k nunca hago guisos para después guardar. K
Hermana es genial este post. Por supuesto, he puesto un enlace en mi fumeteca.
Saludos, hermana...
Tú si que eres la caña Autor. Me alegro de que seamos de la misma madre....
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