Hace un año, en una localidad portuguesa llamada Zambujeira este mago dijo las palabras mágicas que condicionarían todas nuestras acciones del año siguiente: YO CÓMODO.
Más tarde creamos Physalia y todos trabajando, trabajando, para mantener esta estupenda página. Pero llegó la pereza, la desidia en plan aceite. Llega ya la fecha de volver a Zambujeira y todos y todas los Physalios y Physalias parecen estar bajo el influjo revitalizado de las palabras de este mago. Puedo volver a mi blog, k lo sepáis, pero me gustaba compartir este espacio, porque como diría Radio Darwin, compartir es amar.